domingo, 16 de agosto de 2009

Comentarios a recientes dudas y observaciones idiomáticas de los lectores de eltiempo.com

Buenos días:
En el título del artículo ‘Las otras cosas que nos hacen obesos’, no quedaría mejor si escribimos: ‘Las otras cosas que nos hace obesos’.
Atentamente, Leonardo.
Apreciado lector:
No. En cualquier oración, el verbo debe concordar con el número del sujeto. En este caso, la frase tiene un sujeto en plural: “las otras cosas” por lo que el verbo de la frase debe estar en plural: “hacen”.
Otro detalle: Si el objeto estuviera en singular, pero el sujeto siguiera siendo singular, el verbo seguiría en plural: “Las otras cosas que me hacen obeso”.
Paro acá porque esta explicación se hace poco dietética.

Comentario de Henry Cepeda:

“No puedo creer la palabra tan absurda y rebuscada para un titular de prensa. ‘Recomponer’, por Dios qué clase de periodista. Se hubiese usado algo tan simple como "dispuesto a recuperar" ¿qué opinan?”

Apreciado Henry:
En el estudio del idioma, norma que recoge el periodismo, existe el concepto de la economía del lenguaje, que consiste en preferir el término exacto sobre una frase de mayor extensión que expresa lo mismo.
Ahora bien, el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua (www.rae.es), que tantas veces hemos consultado acá, nos resuelve la duda sobre el verbo recomponer:
“Recomponer. Del latín ‘recomponĕre’. 1. Reparar, componer de nuevo”.
A mi juicio, esta definición es muy adecuada a la idea que se quería dar en el titular y que era el interés del presidente de Colombia, Álvaro Uribe, por ‘reparar, componer de nuevo’, las relaciones con sus vecinos.
Por su origen se establece claramente que este verbo no es ni rebuscado ni absurdo.
¿Se pudo haber dicho recuperar? Por supuesto que sí.
Otros sinónimos que cabían son restablecer (no reestablecer), reanudar, retomar, normalizar
Lo importante en todo caso no es el verbo que usemos sino que las relaciones vuelvan a ser amistosas.


Comentario de Eduardo Gómez P.
“Es increíble cómo se maltrata el idioma, aun en titulares en los que, por ser prominentes, se debe tener el máximo cuidado. En este caso "...garantizarle el estudio a los 'niños genio'..." Debe ser "garantizarles" porque no es un niño sino muchos. Y es tan sencilla la regla para saber si hay que poner "le" o "les" al final del infinitivo... Simplemente -y en este caso- uno se pregunta: ¿A cuántos hay que garantizar? Si es a uno, obviamente "le"; si es a más, "les". Fácil, ¿verdad? Otra cosa es que se abusa innecesariamente del "le" o "les". Aquí hubiera podido decirse sencillamente "garantizar el estudio" y eso no hubiera perjudicado en absoluto el significado de lo que se quería decir, además de que se hubiera ahorrado espacio”.

Apreciado Eduardo:
Totalmente de acuerdo y me ahorra una explicación extensa. La regla que se aplica, y que ya hemos considerado en este espacio, es que el pronombre enclítico (me, le, nos, les) debe concordar en número con el objeto indirecto, que se reconoce fácilmente en estas oraciones porque está indicado por la preposición a.
Si el complemento está en singular, el pronombre que se pega al verbo es singular: “garantizarle al niño genio”. Pero como siempre, lo importante es el contenido y ojalá todos los niños genios pudieran tener adecuada oportunidad educativa.

Comentario de Carlos Morales:
“Respetados señores: Deseo reportar los siguientes errores: No se debe escribir genoma del sida, sino genoma del virus del sida. Igualmente, no se debe escribir virus del VIH 1 sino virus del sida o virus VIH 1. Tampoco se escribe virus de ARN sino virus ARN Vale la pena aclarar que son dos cosas diferentes el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) y el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida)”.

Apreciado Carlos:
Muchas gracias. Me ahorra usted también la explicación técnica de la diferencia entre los dos conceptos. Evidentemente solo se puede descifrar el genoma de un organismo, en este caso un virus. Las enfermedades que ocasionan se diagnostican.

Comentario de Diana Echeverri:
Buenos días:
“El plural de álbum no es álbumes. Por favor corregir”
Apreciada Diana:
Lamento no poder recomendar su sugerencia.
El plural del sustantivo álbum sí es álbumes.
Según el Diccionario Panhispánico de Dudas, el plural de este latinismo es una excepción a la regla general y se construye conforme las normas de construcción de plurales en español.
Transcribo la definición que aparece en el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua:
“álbum. ‘Libro en blanco en el que se conservan fotografías, sellos u otros objetos semejantes’ y ‘estuche o carpeta con uno o más discos sonoros’. Su plural es álbumes”. Nada qué hacer.

Comentario de Juan Camilo:
“Se escribe boomerang”.

Apreciado Juan Camilo:
Tampoco podemos acoger su sugerencia.
Varias veces se ha comentado en este espacio que la recomendación de la RAE es la de castellanizar los extranjerismos y adaptar su grafía a las normas de construcción de las palabras en nuestro idioma.
El Diccionario Panhispánico de Dudas explica que la adaptación de la palabra tuvo dos variantes, según el país. En Argentina, México o Ecuador es búmeran. En España y otros lugares, como Colombia, quedó bumerán. Ambas son correctas.
Lamento el efecto bumerán de esta respuesta.

Comentario de Carlos Martínez:
“Buenos días, creo que el subtítulo "Computador, la otra arma" tiene un error. Arma es un sustantivo masculino, así que debería ser "Computador, el otro arma" o "Computador, el siguiente arma". En fin, gracias y éxitos”.

Apreciado Carlos:
Nuevamente respondo con la RAE en la mano. Arma es un sustantivo femenino que excepcionalmente usa el artículo masculino.
“Al comenzar por /a/ tónica, exige el uso de la forma el del artículo si entre ambos elementos no se interpone otra palabra, pero los adjetivos deben ir en forma femenina”, dice el Diccionario Panhispánico.
“En cuanto al artículo indefinido, aunque no se considera incorrecto el uso de la forma plena una, hoy es mayoritario y preferible el uso de la forma apocopada un: ‘un arma seductora’. Lo mismo ocurre con los indefinidos alguno y ninguno: algún arma, ningún arma. El resto de los adjetivos determinativos debe ir en femenino: esa arma, la otra arma”.
Lo que sí creo es que el arma más poderosa es el lenguaje.